“Sin dudar del valor de El guardián entre el centeno, yo me decanto por Nueve cuentos. Toda una literatura. Nueve cuentos, Pedro Páramo y Suicidios ejemplares (Enrique Vila-Matas), son tres libros que dejaría, para siempre, en la mesilla. Los leería una y otra vez, sin descanso. Esos tres libros guardan toda una literatura.”Blog de Pedro Guerra
Poco más se puede decir sobre Suicidios ejemplares. O al menos, yo no me siento capacitada. Dejo, por ello, hablar a la obra por sí sola:
"Era una hora en la que cada día me encontraba mejor, porque siempre sucedía algo, algún mínimo acontecimiento, nunca nada del otro mundo, pero suficiente para mí: el tropezón de una señora gorda, por ejemplo, el viento de la bahía provocando el vuelo de una pamela que yo imaginaba infeliz, la bofetada terrible de un padre a su hijo, los pecados públicos de la taquillera del Venus, la entrada y salida de los parroquianos del Cadí". Muertes por Saudade.
"Así me llaman, piensa ahora Rosa Schwarzer mientras escucha el rumor de la lluvia en el jardín, mientras siente que es atraída por el sonido del tam-tam del país de los suicidas". Rosa Schwarzer vuelve a la vida.
"Escucho el oleaje mientras siento que toda la tarde cab e en una mirada, en una sola mirada de sosiego". Las noches del Iris negro
"Nada obtiene nada que no haya estado persiguiendo, y yo había ido a ese maicomio precisamente buscando la confirmación de una gran sospecha: la de que la soledad es imposible, pues está poblada de fantasmas". Un invento muy práctico
"Buscamos siempre el lado inmóvil del tiempo". El coleccionista de tempestades.
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5 comentarios:
"Nada obtiene nada que no haya estado persiguiendo, y yo había ido a ese manicomio precisamente buscando la confirmación de una gran sospecha: la de que la soledad es imposible, pues está poblada de fantasmas"
Certeras y sabias palabras.
y QUE ME DICE DE LA ÚLTIMA FRASE, LA BÚSQUEDA DEL LADO INMOVIL DEL TIEMPO??? ALGO PARECIDO HE LEIDO EN UN HOMBRE QUE DUERME. CIERTAMENTE LA FRASE ES PARA PENSAR.
El lado inmóvil del tiempo será como un tiempo desnudo de relojes, ¡sofocante ropaje!
Pues a mi me ha parecido una interesante teoría: Hay un tiempo inmóvil? Es el tiempo variable, mutable, movible? O somos nosotros quienes nos movenos y no el tiempo?
Se podría llegar a un estado de lucidez tal en el que consideraríamos que el tiempo no es más que una invención, una abstracción consensuada para la ordenación del caos.
Es algo tan relativo como los conceptos de inteligencia, belleza, verdad, igualdad...
Una gallina no piensa en la hora que es, sabe qué es la noche y qué es el día. Eso sí existe.
Sabe qué es el alimento porque tiene hambre y se sacia. El alimento sí existe.
Las cinco post meridiam, sin embargo, es una maldad -o bondad- humana para concertar un momento en el que merendar, tomar el té, sacar a los toros, o escribir un poema.
El hambre es biológico, por lo que existe. El tiempo -al menos el segmentado- es cultural, un instrumento para ordenar, para instrumentalizar el trabajo humano, que dirína los críticos de la sociedad establecida.
(Después de esto que venga el Punsset y me entreviste, je, je, je...)
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